30 de Junio de 2010, se cumplen 18 años de la mil veces pregonada “salvación del Betis”. 18 años de la mentira más bien contada en la historia de nuestro más que Centenario Betis, Real Betis Balompié. Mentira bien contada por mil veces repetida y bien contada por ser creída por la inmensa mayoría del Beticismo durante muchos años, muchos, tantos como 18.
18 años largos años en los que el escudo, la bandera y todos cada uno de los símbolos que representan al Beticismo han sido arrastrados, humillados, vilipendiados por el autodenominado “salvador” del Beticismo. Un Beticismo que fue a su vez, engañado, humillado y maltratado una y cien veces por un hombre que se define Bético y que, no se engañen, no lo es.
No lo es por la sencilla razón de que un Bético, nunca engañaría a otro Bético quitándole sus acciones, no lo es porque un Bético no engañaría a miles de Béticos con promesas siempre incumplidas, no lo es porque un Bético, simple y llanamente, no robaría el dinero, el capital de su Betis, Real Betis Balompié, no le robaría al resto de Béticos, no robaría, jamás al Beticismo, y por este motivo, ese hombre ha sido acusado y denunciado por otros Béticos y por eso, el día 14 de Julio, declarará en un Juzgado de la Ciudad del Betis en calidad de imputado.
El día catorce de Julio, el imputado, llamado Manuel Ruiz de Lopera, declarará ante la Jueza de Instrucción Doña Mercedes Alaya. Será la primera vez en la historia de nuestro club en la que un mandatario del mismo irá a un Juzgado por perjudicar económicamente al Betis, por desviar dinero del Betis a sus empresas y por salir beneficiado sensiblemente por su cargo en la Sevillanísima Entidad Verdiblanca.
Todo ello me provoca la más absoluta repulsa, mi más rotunda condena, como Béticos que soy, ante el imputado llamado Manuel Ruiz de Lopera.
Repulsa por haber engañado al Beticismo, humillado a sus símbolos, desprestigiado su Centenario, olvidado su Memoria y su Historia, mantenerlo en la indefensión ante todos y cada uno de los estamentos deportivos, matar el cariño que el resto de aficiones nos proferían, y sobretodo, por hacer del Betis, Real Betis Balompié el hazmerreír de toda la España futbolística mediante hechos vergonzosos y vergonzantes que han sido públicos y notorios.
Condena, al mismo tiempo, por ser el primer y único presidente, consejero o mandatario Bético imputado por beneficiarse personal y conscientemente del Betis, Real Betis Balompié, creando empresas parásitas para desviar el dinero de la Entidad y favorecerse y lucrarse a su costa. Yo, como Bético que soy y como parte integrante del Beticismo, condeno al imputado llamado Manuel Ruiz de Lopera, aunque la Justicia no lo haya hecho aún porque el simple hecho de ser imputado ya es una deshonra y una vergüenza para el Beticismo. Igualmente, condeno al imputado porque, aún no habiendo sido declarado culpable aún, los informes de la Unidad de Delitos Económicos de la Guardia Civil así lo atestiguan, al igual que los informes de los Agentes de la Agencia Tributaria encargados de auditar y analizar las cuentas del club en los últimos años.
Por todo ello, y en consecuencia, yo, como Bético, y como parte del Beticismo que soy, a parte de accionista minoritario de la Entidad, exijo al imputado llamado Manuel Ruiz de Lopera su salida inmediata del Real Betis Balompié, la restitución de las acciones al Beticismo, además de la dimisión en pleno de la cúpula directiva del club y todos los que lo han apoyado siendo cómplices necesarios en la mayor mentira fraguada contra el Beticismo en su más que Centenaria historia, llevada a cabo vilmente ayer, 30 de Junio, hace 18 años.
18 años largos años en los que el escudo, la bandera y todos cada uno de los símbolos que representan al Beticismo han sido arrastrados, humillados, vilipendiados por el autodenominado “salvador” del Beticismo. Un Beticismo que fue a su vez, engañado, humillado y maltratado una y cien veces por un hombre que se define Bético y que, no se engañen, no lo es.
No lo es por la sencilla razón de que un Bético, nunca engañaría a otro Bético quitándole sus acciones, no lo es porque un Bético no engañaría a miles de Béticos con promesas siempre incumplidas, no lo es porque un Bético, simple y llanamente, no robaría el dinero, el capital de su Betis, Real Betis Balompié, no le robaría al resto de Béticos, no robaría, jamás al Beticismo, y por este motivo, ese hombre ha sido acusado y denunciado por otros Béticos y por eso, el día 14 de Julio, declarará en un Juzgado de la Ciudad del Betis en calidad de imputado.
El día catorce de Julio, el imputado, llamado Manuel Ruiz de Lopera, declarará ante la Jueza de Instrucción Doña Mercedes Alaya. Será la primera vez en la historia de nuestro club en la que un mandatario del mismo irá a un Juzgado por perjudicar económicamente al Betis, por desviar dinero del Betis a sus empresas y por salir beneficiado sensiblemente por su cargo en la Sevillanísima Entidad Verdiblanca.
Todo ello me provoca la más absoluta repulsa, mi más rotunda condena, como Béticos que soy, ante el imputado llamado Manuel Ruiz de Lopera.
Repulsa por haber engañado al Beticismo, humillado a sus símbolos, desprestigiado su Centenario, olvidado su Memoria y su Historia, mantenerlo en la indefensión ante todos y cada uno de los estamentos deportivos, matar el cariño que el resto de aficiones nos proferían, y sobretodo, por hacer del Betis, Real Betis Balompié el hazmerreír de toda la España futbolística mediante hechos vergonzosos y vergonzantes que han sido públicos y notorios.
Condena, al mismo tiempo, por ser el primer y único presidente, consejero o mandatario Bético imputado por beneficiarse personal y conscientemente del Betis, Real Betis Balompié, creando empresas parásitas para desviar el dinero de la Entidad y favorecerse y lucrarse a su costa. Yo, como Bético que soy y como parte integrante del Beticismo, condeno al imputado llamado Manuel Ruiz de Lopera, aunque la Justicia no lo haya hecho aún porque el simple hecho de ser imputado ya es una deshonra y una vergüenza para el Beticismo. Igualmente, condeno al imputado porque, aún no habiendo sido declarado culpable aún, los informes de la Unidad de Delitos Económicos de la Guardia Civil así lo atestiguan, al igual que los informes de los Agentes de la Agencia Tributaria encargados de auditar y analizar las cuentas del club en los últimos años.
Por todo ello, y en consecuencia, yo, como Bético, y como parte del Beticismo que soy, a parte de accionista minoritario de la Entidad, exijo al imputado llamado Manuel Ruiz de Lopera su salida inmediata del Real Betis Balompié, la restitución de las acciones al Beticismo, además de la dimisión en pleno de la cúpula directiva del club y todos los que lo han apoyado siendo cómplices necesarios en la mayor mentira fraguada contra el Beticismo en su más que Centenaria historia, llevada a cabo vilmente ayer, 30 de Junio, hace 18 años.
