Dedicado a todos los béticos sin exepción, pero sobre todo a uno que es cabezón a más no poder, erre que erre el Martínez Soria, si a ti Ricardo, Corazón de León.
El primer Presidente que tuvo el honor de presidir la Asociacíon. Va por tí.
Caí rendido en la cama, no sin antes echarme las preceptivas
gotas para mi maltrecho oído, la solución ya la sé operarme, cerré los ojos y
al instante observo que se me viene a la mente, una foto que está en casa de mi
hermano mayor Antonio, que está junto a mi padre y que un día le pregunté, ¿donde
es esa foto? y él me respondió en Jerez, parecía la Plaza Nueva, que guapos
estaban los dos, ¿por cierto de que fecha estamos hablando, y me dispuse hacer
cábalas, Mi hermano tiene 63 años estamos en el 2009, de tres a nueve 6 de seis
a diez 4, total, mi hermano es del 46 y tendría 11 o 12, de 1957, o sea ya
tenía yo un año, seguramente fueron los dos a ver el partido Jerez-Betis, me
dije.
Estamos paseando por las calles de Granada, ahí va mi padre delante, pero no reconozco con
quien estoy hablando, yo, tengo personas a mi alrededor, me transporto al campo
de fútbol y se me vienen los nombres de Ñito y Porta, pero del Betis, no me
acuerdo de ninguno que jugaron aquel partido, yo estoy en fondo y el lleno es
impresionante, El autobús está aparcado justo al lado de la Cárcel , y horror
nos están apedreando el autobús, mi Padre me coge y me lleva a las escalinatas
y allí quedamos agachados, que susto, entonces seguro que habremos ganado y por
eso se han enfadado, a ver Beticista échame una mano, no tengo ganas de ir al
ordenador a estas horas de la noche, pero me da a mí que el año rondará 1969,
1970, aprox.
Eso sí que eran aficionados me dije, sin bufanda, sin gorro
pero con un pedazo de escudo del Betis, cada uno en su solapa, señal inequívoca
del buen bético, ¿y yo dónde estoy?, ahora te veo, como no comprando estampa en
el Kiosco, y ahora estás observando al Cristo de los Faroles, mientras tu padre
y amigos, están en un velador tomando vinos. ¡Vaya otra cárcel¡ observando al
centinela de la puerta y camino del campo del Arcángel, vaya llenazo todo es
verde me decía, me da la impresión de que hemos perdido, ahí un nota que
celebra los goles como un poseso el Cuesta ese, y claro con el defensa
Mingorance, que más feo no puede ser, cualquiera gana. Vaya, mi amigo Beticista
va a tener trabajo.
Hoy jugamos en casa y como cada Domingo de partido, mi Padre
me transportaba en la barra de la bicicleta que era de la Empresa, mi padre era
varillero por aquel entonces, cuanto sufrimiento en sus piernas para la
cantidad de baches y piedras por el camino, donde están los bomberos en el Polígono
Sur, aquello era el Tamarguillo, y para evitar el tráfico, mi padre sorteaba
miles de obstáculo. Palmeras en el Gol Norte y el famoso Kiosco donde mi padre,
compraba el famoso Pictolin, de envase verde como debe ser, ya estoy en mío
asiento agarrado al cual hierro, y desde esa posición inverosímil, púes mi
padre me agarraba por detrás para no caerme de espalda, observaba a un jugador
tirar los cornes, le decían el de la pierna de caoba, pero yo solo sé que era
de carne y hueso, Dios mío Macario, que golpe se ha pegado al tirarse en
plancha al rematar, que grande eres Quino, como cabeceabas de arriba abajo, como
encaraba al defensa con un dribling único, has dejado una huella en mi,
Con el tiempo fui al fútbol en el Velosolex nuevo que te
compraste, el famoso Mosquito, Es curioso pero me enteré muchos años más tarde
y nunca te lo pregunte.
¿Qué fuiste a Madrid a ver al Betis en un Velosolex y
paraste para hacer noche en Valdepeñas, me lo creo, ya sé que a ti te gustaba
el vino para rabiar y que mejor sitio para pernoctar, o sea tardaste dos días en
llegar, porque el Velosolex, no corría a más de 40,50 Km/hora. Así que calculo
que 540 Km divido entre 40 salen unas 13 horas.
Mi hermano José Luís me dijo un día que sufriste un pinchazo
en un Pueblo de la provincia de Sevilla, y venías arrastrando el vespino, hasta
que un buen samaritano se apiadó de ti, y te transportó lo más cerca posible de
casa, y tu dijiste la última vez que me pasa, y montantes una rueda de repuesto
en un vespino, ver para creer, no me extraña como la Guardia Civil, te paraba a
cada momento, no para multarte si no para reírse de tu ingenio, porque señores
esa rueda de repuesto estaba pintada con los colores verdiblancos.
Me rio solo, eso solo se le ocurre a mi Padre, le ha puesto
un escudo del Betis a todos los cuadros donde mis hermanos se han ido casándose,
curiosamente todos mis cuñados, han salido béticos, si no, no entraban en mi casa, yo lo llamaba los cuadros
de los Ahorcados, por aquello de, el que se casa se ahorcaba de por vida.
Vaya me tocó, dice mi madre que me acerque a la peña, a ver
si esta mi Padre que es la hora de comer, fijo ahí está su vespino
inconfundible, Pues si que está contento, tengo que pedir refuerzo porque yo no
puedo con él, Mi padre debido a su trabajo, ya sabéis el de Emasesa, solía
beber mucho vino, me imagino que para olvidar lo que ve en su trabajo, nada
agradable, y que carajo y porque le gustaba a rabiar, aunque eso si vino
peleón, peleón , nada de gilipolleces de reservas. ´cuando estaba a sus anchas,
tenía un grito de guerra, que quedo marcado en mi, su famoso grito de BETI,
BETI, BETI, que con sentimiento gritaba en su Peña, junto a sus amigos del
mismo trabajo. ¿Cuántas veces hemos tenido que ir a la Peña? Cientos.
Papá dame dinero para ir al Betis y dinero para el Autobús,
como lo cogía contentillo, ya sabéis, no dudaba en meterse la mano en el
bolsillo y me daba el dinero.es que en mi Peña la Andrés Aranda, vendía las
entradas en la fachada de la Peña.
Allá iba yo con mi Pandilla a Gol Sur, junto al Chato, ya mi
padre no me acompañaba, él dejo de sufrir y me dejo mi Herencia, AAAGGGGGGGGG,
Pshhhhhh.
El primer Presidente que tuvo el honor de presidir la Asociacíon. Va por tí.
Caí rendido en la cama, no sin antes echarme las preceptivas
gotas para mi maltrecho oído, la solución ya la sé operarme, cerré los ojos y
al instante observo que se me viene a la mente, una foto que está en casa de mi
hermano mayor Antonio, que está junto a mi padre y que un día le pregunté, ¿donde
es esa foto? y él me respondió en Jerez, parecía la Plaza Nueva, que guapos
estaban los dos, ¿por cierto de que fecha estamos hablando, y me dispuse hacer
cábalas, Mi hermano tiene 63 años estamos en el 2009, de tres a nueve 6 de seis
a diez 4, total, mi hermano es del 46 y tendría 11 o 12, de 1957, o sea ya
tenía yo un año, seguramente fueron los dos a ver el partido Jerez-Betis, me
dije.
Estamos paseando por las calles de Granada, ahí va mi padre delante, pero no reconozco con
quien estoy hablando, yo, tengo personas a mi alrededor, me transporto al campo
de fútbol y se me vienen los nombres de Ñito y Porta, pero del Betis, no me
acuerdo de ninguno que jugaron aquel partido, yo estoy en fondo y el lleno es
impresionante, El autobús está aparcado justo al lado de la Cárcel , y horror
nos están apedreando el autobús, mi Padre me coge y me lleva a las escalinatas
y allí quedamos agachados, que susto, entonces seguro que habremos ganado y por
eso se han enfadado, a ver Beticista échame una mano, no tengo ganas de ir al
ordenador a estas horas de la noche, pero me da a mí que el año rondará 1969,
1970, aprox.
Eso sí que eran aficionados me dije, sin bufanda, sin gorro
pero con un pedazo de escudo del Betis, cada uno en su solapa, señal inequívoca
del buen bético, ¿y yo dónde estoy?, ahora te veo, como no comprando estampa en
el Kiosco, y ahora estás observando al Cristo de los Faroles, mientras tu padre
y amigos, están en un velador tomando vinos. ¡Vaya otra cárcel¡ observando al
centinela de la puerta y camino del campo del Arcángel, vaya llenazo todo es
verde me decía, me da la impresión de que hemos perdido, ahí un nota que
celebra los goles como un poseso el Cuesta ese, y claro con el defensa
Mingorance, que más feo no puede ser, cualquiera gana. Vaya, mi amigo Beticista
va a tener trabajo.
Hoy jugamos en casa y como cada Domingo de partido, mi Padre
me transportaba en la barra de la bicicleta que era de la Empresa, mi padre era
varillero por aquel entonces, cuanto sufrimiento en sus piernas para la
cantidad de baches y piedras por el camino, donde están los bomberos en el Polígono
Sur, aquello era el Tamarguillo, y para evitar el tráfico, mi padre sorteaba
miles de obstáculo. Palmeras en el Gol Norte y el famoso Kiosco donde mi padre,
compraba el famoso Pictolin, de envase verde como debe ser, ya estoy en mío
asiento agarrado al cual hierro, y desde esa posición inverosímil, púes mi
padre me agarraba por detrás para no caerme de espalda, observaba a un jugador
tirar los cornes, le decían el de la pierna de caoba, pero yo solo sé que era
de carne y hueso, Dios mío Macario, que golpe se ha pegado al tirarse en
plancha al rematar, que grande eres Quino, como cabeceabas de arriba abajo, como
encaraba al defensa con un dribling único, has dejado una huella en mi,
Con el tiempo fui al fútbol en el Velosolex nuevo que te
compraste, el famoso Mosquito, Es curioso pero me enteré muchos años más tarde
y nunca te lo pregunte.
¿Qué fuiste a Madrid a ver al Betis en un Velosolex y
paraste para hacer noche en Valdepeñas, me lo creo, ya sé que a ti te gustaba
el vino para rabiar y que mejor sitio para pernoctar, o sea tardaste dos días en
llegar, porque el Velosolex, no corría a más de 40,50 Km/hora. Así que calculo
que 540 Km divido entre 40 salen unas 13 horas.
Mi hermano José Luís me dijo un día que sufriste un pinchazo
en un Pueblo de la provincia de Sevilla, y venías arrastrando el vespino, hasta
que un buen samaritano se apiadó de ti, y te transportó lo más cerca posible de
casa, y tu dijiste la última vez que me pasa, y montantes una rueda de repuesto
en un vespino, ver para creer, no me extraña como la Guardia Civil, te paraba a
cada momento, no para multarte si no para reírse de tu ingenio, porque señores
esa rueda de repuesto estaba pintada con los colores verdiblancos.
Me rio solo, eso solo se le ocurre a mi Padre, le ha puesto
un escudo del Betis a todos los cuadros donde mis hermanos se han ido casándose,
curiosamente todos mis cuñados, han salido béticos, si no, no entraban en mi casa, yo lo llamaba los cuadros
de los Ahorcados, por aquello de, el que se casa se ahorcaba de por vida.
Vaya me tocó, dice mi madre que me acerque a la peña, a ver
si esta mi Padre que es la hora de comer, fijo ahí está su vespino
inconfundible, Pues si que está contento, tengo que pedir refuerzo porque yo no
puedo con él, Mi padre debido a su trabajo, ya sabéis el de Emasesa, solía
beber mucho vino, me imagino que para olvidar lo que ve en su trabajo, nada
agradable, y que carajo y porque le gustaba a rabiar, aunque eso si vino
peleón, peleón , nada de gilipolleces de reservas. ´cuando estaba a sus anchas,
tenía un grito de guerra, que quedo marcado en mi, su famoso grito de BETI,
BETI, BETI, que con sentimiento gritaba en su Peña, junto a sus amigos del
mismo trabajo. ¿Cuántas veces hemos tenido que ir a la Peña? Cientos.
Papá dame dinero para ir al Betis y dinero para el Autobús,
como lo cogía contentillo, ya sabéis, no dudaba en meterse la mano en el
bolsillo y me daba el dinero.es que en mi Peña la Andrés Aranda, vendía las
entradas en la fachada de la Peña.
Allá iba yo con mi Pandilla a Gol Sur, junto al Chato, ya mi
padre no me acompañaba, él dejo de sufrir y me dejo mi Herencia, AAAGGGGGGGGG,
Pshhhhhh.