A este Betis flaco todo son pulgas (LUIS CARLOS PERIS)

Que venga quien venga, da igual



Si en casi dieciocho años de condena sólo triunfaron dos, ¿qué importancia tiene el nombre del nuevo técnico?

DOLOR, de dolor a dolor y tiro porque me toca, qué se le va a hacer si así es el Betis, este Betis que se desangra sin que nadie de los que lo manejan sepa cortar la hemorragia. En el campo del Levante se ha confirmado la sentencia a Tapia como hace dos años y pico se confirmó la de Héctor Cúper, una víctima más. Es como la crónica de una muerte mil veces anunciada y nunca certificada la que anuncia la de un hombre honesto y profesionalmente preparado que no ha podido con la nave. No ha podido con la nave como no pudieron otros de perfil superior al suyo y es, sencillamente, porque la nave es ingobernable.

Se irá Tapia como antes se fueron técnicos de mucha prosapia, por la gatera. En el tiempo de ignominia se han ido todos por la gatera menos Serra, Luis y Juande. El primero fue el grandilocuente D'Alessandro y el último este cordobés de gesto serio, pero es que la nómina de entrenadores que fracasaron en el Betis es muy larga y si resulta que los entrenadores pasan y el que manda permanece, ¿de quién la culpa, del que pasa o del que siempre está? Kresic, Oliveira, Cantatore, Clemente, Griguol, Hiddink, Hadzibegic, Vázquez, Víctor Fernández, Irureta, Cúper, Chaparro, Nogués y ahora Tapia, demasiadas cuerdas para un solo violín, demasiadas.

Y ahora ¿qué más da el que venga? Desde aquí se ha dicho más de una vez que en el Betis, en este Betis, quizá se debiera fichar al entrenador por semanas y mantenerlo mientras gane para firmarle el finiquito a la primera derrota. El ambiente creado en las tripas del club se hace tan irrespirable que la vida se hace muy larga para el encargado de velar por la buena marcha del negocio, que es, no se olvide, el entrenador. En ya casi dieciocho años de condena, en el Betis sólo triunfaron Serra y Juande y cubrió un papel digno Aragonés, sólo eso. Los demás, unos más que otros, bajaron los brazos al ver dónde se habían metido. Por tanto ¿qué más da que vengan Fulano o Mengano?


http://www.diariodesevilla.es/article/opinion/616096/venga/quien/venga/da/igual.html

Como siempre, toda la razón y nada que objetar. Dentro de los "qué más da", los hay malos de solemnidad y otros que pueden tener un papel aseadito, pero la tónica será siempre la misma: nadería.

Esto es como la peli del día de la marmota.

Estoy ya tan asqueado que sólo espero que tenga suerte Victor.

mientras este lopera no habra cura definitiva, solo espero que victor sea capaz al menos de dar un alivio y calme algo el dolor que tenemos los beticos

Un optimismo bastante realista



El discurso de Víctor Fernández nos lleva a recordar al de su primera vez, pero con los pies más en el suelo



LEYENDO los pensamientos de Víctor Fernández bien en letra impresa o cara a cara con él nos encontramos con la nueva de que el maño ha cambiado de talante, pero sólo hasta cierto punto. En la actualidad, el entrenador del Betis es muy parecido al que llegó en el verano de 2002 en el apartado de la ilusión y en nada al que digirió la 2003-04 como un amargo e indigesto cáliz. Siempre optimista, Víctor fue perdiendo el estímulo a fuer de conocer el paño para ir a un discurso rutinario, lleno de lugares comunes y que le llevó a una desconexión casi total de un vestuario que, por el mismo camino, fue dejando de creer en él.

La primera campaña la empezó ordenando un Betis espectacular que daría un par de campanazos ciertamente estruendosos. Si en el debut de Riazor, el equipo verde, blanco y verde cuajó uno de los mejores partidos de su historia centenaria, el repaso al Barça en el exilio huelvano -gol de Varela en el recuerdo unánime- fue de no te menees. Estábamos ante un Betis que se acababa de reforzar con Assunçao y que había repescado a Alfonso, pero esa trayectoria iba a torcerse pronto, primero en Auxerre y después en Huelva cuando cayó eliminado en infortunio compartido por Prats y Luis Fernández. Ahí ya palmó la euforia y nada sería parecido.

Ahora recuerda Víctor al que vino del Celta, pero con el pecho menos henchido, con los pies más en el suelo. Con el triunfo de Cartagena le han llovido las entrevistas y su discurso me parece convincente, adecuado para que el Betis logre volver al lugar del que fue exiliado de forma ignominiosa desde dentro de sí mismo. Aunque el problema principal del Real Betis Balompié es de muchísimo más calado, no cabe duda de que este tiempo de optimismo que nació con el triunfo en Cartagena es, en gran parte, obra de Víctor Fernández, un entrenador de Primera División que está acorde con la categoría de un club tantas veces alanceado y ninguna, todavía, muerto.



http://www.diariodesevilla.es/article/opinion/645203/optimismo/bastante/realista.html

El Betis sale muy herido de Vigo



La falta de solidez atrás y las ausencias harán muy complicado el sprint con un pelotón tan concurrido



Luis Carlos Peris



DESPERDICIABA el Betis una bala más por una repetición de los errores que lleva cometiendo durante todo el curso. ¿Cuántos han sido ya los partidos en que el equipo bético regaló una de sus partes? En Balaídos fue la primera para estar a merced de un equipo que parecía impulsado por queroseno mientras él daba la impresión de moverse mediante gas oil. Llegando tarde en cada balón dividido y una falta de solidez defensiva que hacen que el ascenso se vea ahora como una misión muy complicada. ¿Es de recibo la falta de vigilancia en un córner del jugador céltico que marcó el gol, quién tenía que marcarlo?

Con esa fragilidad defensiva resulta complicado conseguir el único objetivo del curso, volver a la categoría natural, a esa categoría que el Betis perdió hace casi un año. Haciendo agua por los flancos y sin solvencia por el corazón de la línea, con un centrocampismo lento e impreciso, sólo la calidad arriba mantiene vivo a este Betis. Emana fue nuevamente decisivo, como Pereira, y ahora llega la negra nueva de la lesión de Sergio García. Hasta hace poco se llegó a pensar que quizá podría el Betis tener los deberes medio enjaretados cuando Emana se fuese con Camerún. Ahora no parece posible y, por si fuera poco, tampoco podrá contar con Sergio García.

Decía Víctor a la terminación que hubiese preferido perder el partido antes que a Sergio y tiene razón, pues del empate a la derrota no hay mucho y no contar con el catalán cuando se tenga que aclarar la bulla que hay por el ascenso puede ser fatal. Fue un paso atrás el del Betis en esta jornada, el pelotón de cabeza, en el que permanece, se puebla por momentos hasta convertirse en una bulla intransitable y regalando como regala un partido sí y otro también resultará difícil que las cosas salgan como es debido. Desde que el fútbol es fútbol se sabe que un equipo sin cimientos es como un castillo de naipes. Y, por si fuera poco, sin Emana y Sergio para el sprint definitivo.



http://www.diariodesevilla.es/article/opinion/682068/betis/sale/muy/herido/vigo.html

mas claro agua....
y el shavalito contandonos historietas y tonterias...
shavalito hijo que tras mas de un mes parado no va estar sergio garcia para jugar en condiciones en la fecha que tu dices , mintiendo como siempre a sabiendas y por ordenes de tu amo...
si ya estaba fisicamente justito , tras ese paron tendra que estar minimo otra semana para dar aunque sean 45 minutos a un nivel aceptable

Mira que lo sabemos hace meses...pues nada, hay quien sigue comprando la moto que nos venden de que esta gente nos va a llevar a primera.

A este Betis flaco todo son pulgas


La rodilla de Sergio García, la marcha en breve de Emana, la debilidad de la defensa, el maltrato de los árbitros...

Luis Carlos Peris

PULGAS y más pulgas, que han enflaquecido tanto al todavía Real Betis Balompié que cada día tiene más pulgas. Al sofocón de cada semana se une ahora lo de que la lesión de Sergio es más grave de lo que parecía. Bueno, de lo que parecía no, sino de lo que diagnosticaron los médicos tras la infausta torcedura de rodilla en Balaídos. No hay una sola noticia agradable en este Betis de la hora, por lo que hace bien el bético en agarrarse a los recuerdos para no caer en un estado depresivo de incalculables consecuencias, de ahí que resultase entrañable y multitudinaria la rememoración el viernes de la Liga del 35.

Puede que no estuviesen en Los Monos todos los que son, pero que son todos los que estaban nadie puede ponerlo en duda. Y al día siguiente, el enésimo sofocón viendo cómo se tiraba estúpidamente por la borda un triunfo que mantenía al equipo con ciertas garantías de alcanzar el objetivo único, volver a la categoría natural. Un error imperdonable tiraba un partido que estaba ganado, algo que ha venido haciendo el Betis con rara contumacia desde que la Liga echó a andar. Un error que servía para recalcar que con la defensa que sale el Betis a esos campos resulta una misión totalmente imposible alcanzar el objetivo de esta temporada.

Y tras el error, impropia equivocación de un sistema defensivo profesional, uno de los presuntos culpables se defendía de las acusaciones diciendo que esperaba que el portero hubiese salido por ese fatídico balón. Y tiene razón Rivas si no fuese porque él debiera saber que ese portero al que acusa no acostumbra a salir de la portería así como así. Por supuesto que el balón era del portero, pero conociendo al portero... Al poco del error, la noticia de que la rodilla de Sergio hace que el catalán no sólo no esté sino que tampoco cabe esperarle, Emana se va en breve, la defensa es de verbena, los árbitros se ensañan, pulgas, más pulgas para este Betis flaco como nunca.

http://www.diariodesevilla.es/article/opinion/693011/este/betis/flaco/todo/son/pulgas.html